La Libertad Avanza podría perder en breve la presidencia del Concejo Deliberante de Bahía Blanca, el único órgano legislativo municipal que controla en toda la provincia.
Sumida en una confrontación interna que también involucra a Juntos, Marité Gonard ha perdido el respaldo de algunos concejales que la llevaron a la presidencia del deliberativo, desplazando en diciembre pasado al peronismo alineado con el intendente Federico Susbielles.
Al aliarse con los concejales cercanos a Patricia Bullrich, Gonard no solo provocó la fractura del bloque de Juntos (uno de los pocos que seguía unido tras la crisis de la coalición a nivel nacional), sino que también despojó de su oficina a su compañero de bloque, Carlos Alonso.
En respuesta, Alonso ha acusado a Gonard de abuso de poder e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
«Quiero expresar mi disconformidad por haber sido obligado a compartir mi oficina con concejales de otros espacios políticos, lo cual considero una usurpación de mi espacio de trabajo», declaró Alonso en un comunicado, advirtiendo que podría llevar el caso ante la Justicia.
Gonard entregó las llaves de esa oficina a sus nuevos compañeros de bloque: Silvina Rubio y Marcos Streitenberger, quienes responden a Santiago Nardelli a nivel local y a Bullrich en lo nacional. Este bloque también incluye a Valeria Rodríguez, vinculada a José Luis Espert, quien ya colaboraba con Gonard.
En Bahía Blanca, La Libertad Avanza tuvo una de sus mejores elecciones a nivel local. La lista que llevó a Oscar Liberman como candidato a intendente quedó en segundo lugar y consiguió cuatro concejales, entre ellos Marité Gonard, quien antes de asumir acordó con Alonso y el bloque de Juntos para que la presidencia del Concejo quedara en manos de la oposición a Susbielles.
El malestar de Juntos con Gonard es evidente, y en estos días ya hay voces dentro del bloque que aseguran: «A Gonard la van a remover en breve».
Para llegar a la presidencia, Gonard rompió inicialmente con los dos concejales de Liberman, quienes estaban dispuestos a ceder la presidencia al peronismo. Poco después, se distanció de Alonso y comenzó a acercarse a Rodríguez.
Tras el polémico episodio en el que se vio involucrada por la compra de un celular y la intervención de un troll de Gordo Dan, Gonard y Rodríguez avanzaron en una fusión con los dos concejales de Bullrich.
Este movimiento provocó la ruptura del bloque de Juntos, que quedó con ocho bancas, igualando al peronismo en número.
El enojo de Juntos con Gonard es palpable, y algunas fuentes aseguran que podría ser destituida en diciembre, coincidiendo con el recambio de autoridades al cumplirse un año de su mandato.
En la oposición, algunos sectores ven con buenos ojos ceder la presidencia a un concejal del bloque de Susbielles. El argumento es que esto evitaría que el oficialismo se victimice, al tiempo que permitiría concentrar esfuerzos en los proyectos del Ejecutivo, dejando de lado las internas de la oposición.
«Lo más probable es que todo estalle. El peronismo tiene la llave, la cuestión es si la usará», comentó otra fuente del Concejo, asegurando que Gonard ya ha perdido el apoyo suficiente para que su destitución sea una realidad.
Sin embargo, ahora surgen interrogantes sobre la postura del oficialismo local. «Quizás al peronismo le convenga mantener el diálogo con Nardelli y postergar el conflicto», opinó un opositor a Susbielles y crítico de Gonard.
En este contexto, la guerra interna de La Libertad Avanza en Bahía Blanca sigue escalando, apenas días después de la controversia generada por la inclusión de dos violadores y un homicida en la lista de candidatos libertarios para la Universidad Nacional del Sur.
Con información de La Política Online
Publicado en lanuevacomuna.com