El Juzgado Federal N°2 de Santa Fe procesó a Leonardo Airaldi, ex presidente de la Sociedad Rural de Diamante, por tráfico de cocaína, y le impuso un embargo de 5 millones de pesos. Actualmente, Airaldi se encuentra detenido en una prisión de Entre Ríos. Junto a él, también fue procesado Diego Torres, un empleado de uno de sus establecimientos ubicado en una isla en el río Paraná. Torres se encuentra prófugo, con orden de captura.
Los investigadores descubrieron un cargamento de 29 kilos de cocaína por accidente. La policía encontró la droga debajo de la cama en la casa donde vivía Torres, quien había sido denunciado por violencia de género. Lo que llamó la atención fue que los paquetes de cocaína llevaban etiquetas y marcas con los nombres «Qatar» y «Emiratos», además de la imagen de un Boeing 737.
La vivienda donde se incautó la droga está situada en la calle Solís al 600, en Puerto Gaboto, Santa Fe. Esta sustancia había sido almacenada allí por un individuo conocido en la costa de enfrente, en Diamante: Airaldi, quien administraba un campo de gran tamaño en una isla cercana a Gaboto, por donde transitan barcazas provenientes de Paraguay.
El fiscal federal Walter Rodríguez conectó diferentes elementos y reunió información de varios expedientes para reconstruir cómo Airaldi manejaba esa cantidad de droga. La coincidencia temporal en la incautación de los 29 kilos de cocaína genera interpretaciones y sospechas más profundas, ya que en el momento en que se descubrió la droga en la casa de Puerto Gaboto, el 10 de agosto de 2022, en Rosario se estaban produciendo movimientos inusuales de grandes cargamentos de cocaína que se preparaban para ser enviados a Dubái desde el complejo portuario al norte de la ciudad.
El 26 de agosto de 2022, la Policía Federal incautó 1.600 kilos de cocaína en un galpón del barrio Empalme Graneros, en el sudoeste de Rosario. Ese cargamento también tenía como destino Dubái.
Dieciséis días antes, los 29 kilos de cocaína habían sido descubiertos por casualidad en la casa del puestero Diego Torres, empleado del establecimiento El Pillo, que era gestionado por Airaldi. ¿Tendrían esos cargamentos el mismo destino o provenían de la misma fuente?
En una camioneta de “Mameluco” Villalba
Airaldi había ganado notoriedad mediática tras ser arrestado en Rosario por comprar droga cerca de un búnker. El caso llamó la atención por tratarse del ex presidente de la Sociedad Rural de Diamante y porque protagonizó un incidente durante el operativo.
El 22 de julio de 2022, en un operativo de Gendarmería, Airaldi fue detenido en una camioneta VW Amarok junto a otras tres personas. Ese vehículo fue confiscado en 2023 en Entre Ríos, junto con armas y droga.
La investigación en Rosario contra Airaldi permitió al fiscal Rodríguez obtener información clave de los teléfonos incautados, algo crucial en cualquier investigación judicial en la actualidad. Además, la Prefectura realizó tareas de inteligencia en torno al puesto y el establecimiento en la isla. Un cargamento de cocaína, el río Paraná, la isla y Airaldi componían un cuadro enigmático. Surge la pregunta de si ese lugar servía como punto de llegada para grandes cantidades de droga procedente de Paraguay.
El Pillo se encuentra a unos 20 minutos de navegación desde la desembocadura del río Carcarañá hasta el Coronda. Según un relevamiento de la Prefectura, es una zona caracterizada por «anclajes sospechosos de barcazas».
Un testimonio en otra causa también fue crucial en la investigación de Rodríguez: la declaración de un informante ante el fiscal de San Lorenzo, Aquiles Balbis, quien relató que Torres, el empleado de Airaldi, tiene varios puestos en la isla y que se desplaza en una lancha de alta potencia, imposible de alcanzar por la Prefectura.
Esta fuente explicó que en una ocasión miembros de esa fuerza intentaron perseguir a Torres, pero no pudieron alcanzarlo porque su lancha, equipada con un motor Mercury de 150 HP, estaba «chipeada». El informante añadió que solía comprar carne a Torres con regularidad y que, en una ocasión, al acompañarlo a uno de los puestos en la isla, recibió una llamada que lo instó a buscar «mercancía en Diamante».
“Pensé que era una broma y le dije que no, pero después de dos horas regresó con un paquete grande, una bolsa negra, en la lancha. Me dijo que tenía que llevar el paquete a Gaboto”, narró el testigo.
El testigo también mencionó que Torres le contaba que «Airaldi tenía una pista en la isla para que aterrizaran avionetas con droga», según consta en el expediente. A este testimonio clave se sumó otro que perfiló a Airaldi, elaborado por Prefectura, sobre el iPhone 12 que Gendarmería incautó al productor rural en Rosario en 2022.
En las conversaciones era evidente que cuando Airaldi y Torres, según se desprende de la causa, hablaban de droga, utilizaban un lenguaje bastante rudimentario. Al referirse a la cocaína, usaban términos como «maple, carne, lomo y novillo».
El iPhone también contenía un diálogo llamativo entre Airaldi y un contacto no registrado, en el que le sugería borrar la palabra «avión». «No mandes esas cosas por acá», le advirtió el ex presidente de la Sociedad Rural de Diamante.
Lo peculiar de este caso es que, a partir de diciembre de 2022, aparecen como responsables de El Pillo otras personas, entre las cuales figura como director suplente un socio de la Bolsa de Comercio de Rosario, un apellido bastante reconocido en la ciudad.
Con información de La Nación
Publicado en lanuevacomuna.com