Sin demasiada gestión para mostrar, con un vecinalismo inventado y sin mayores apoyos de referentes provinciales o nacionales que lo acompañen, el intendente Arturo Rojas camina hacia las elecciones PASO sembrando la discordia a su alrededor para tratar de erigirse como la opción más conocida entre un electorado que ve cada vez más opciones desconocidas sobre la mesa.
Lo que pasó en las últimas horas tuvo que ver con el rompimiento interno del PRO, algo que se ha sumado a otras fragmentaciones dentro de los espacios que podrían representar una amenaza para el vecinalismo de Rojas, sobre todo dentro de Juntos por el Cambio, que fue la base que le permitió un histórico triunfo en 2019.
A los gritos en un café de la ciudad la concejal Eugenia Vallota y el referente del PRO, José Dodds, dejaron en claro que la unidad del espacio macrista en Necochea no llega a acuerdos. La pelea se replicó en medios afines al oficialismo y su aparato de prensa paralelo, agitando aún más las aguas de una interna que podría hacer colapsar la propuesta.
El detalle: Vallota es aliada en el HCD del oficialismo de Nueva Necochea y más de una vez se ha hecho conocida por sus propuestas que, más que provocar y volcar desinformación, no han conseguido nada para el distrito. El secreto a voces es replicado en todo el arco político y la propia concejal lo ha hecho notorio incluso recientemente al comportarse «más papista que el Papa» al defender la licitación express de dos balnearios por cifras irrisorias, un proyecto por el que ni los propios concejales oficialistas estuvieron dispuestos a exponerse.
Rompan todo
El episodio de Vallota se suma a algunas cuestiones inexplicables dentro del radicalismo, con una interna imposible basada sospechosamente en una perspectiva que aún no se resuelve: la vieja guardia radical insiste con un mismo candidato que viene de tres derrotas consecutivas y la juventud del partido, Alternativa Radical, insiste con ocupar espacios de preponderancia alegando una renovación necesaria.
Si no se consigue la unidad en el radicalismo, puede que el sábado próximo (día de cierre de listas) haya tres líneas internas diferentes participando en las PASO dentro de Juntos por el Cambio como colectoras de la lista de Facundo Manes. Además, está la posibilidad de otra lista de la línea de Diego Santilli (que hoy lanzó su candidatura) encarnada por la gente que comanda Martín Domínguez Yelpo, otro de los que ha sabido ser aliado de Rojas en los últimos tiempos.
Las tres líneas radicales más la de Santilli y la posibilidad de que Vallota y Dodds ironicamente hayan roto la unidad de «Juntos», más alguna otra aventura de las que frecuentemente aparecen cuando la promesa de votos es grande, las perspectivas dentro de Juntos por el Cambio es la de una fragmentación que terminaría beneficiando al «vecinalismo» del intendente.
Mucho cacique y poco indio
Sumada a la fragmentación dentro de Juntos por el Cambio, la interna dentro del kirchnerismo tampoco muestra signos de unidad y, para colmo, el intendente realizó una maniobra que agitó aún más el avispero cuando firmó (algunos dicen que de manera ilegítima) la intervención del Partido Fe en la provincia de Buenos Aires poniendo a uno de sus laderos, el concejal Guillermo Sánchez, como interventor.
Aunque la intervención se dictó con la excusa de estar opuestos a la decisión de Fe en Buenos Aires de acompañar al kirchnerismo, luego el interventor Sánchez reafirmó la posición de pertenencia al Frente de Todos, lo que hizo evidente que el movimiento buscaba solo tomar el control del espacio, haciéndolo estallar en mil pedazos.
A ese panorama se suma la interna que enfrenta por estas horas la alianza entre camporistas y massistas para el armado de listas en el Frente de Todos, con el Sindicato de Camioneros encabezando reclamos para buscar lugares que, en rigor de verdad, serán dificiles de conseguir si las facciones no se unifican.
La advertencia de las agrupaciones sociales, políticas y sindicales que forman parte del amplio abanico del Frente de Todos en Necochea de ir a elecciones con un «ejército de heridos» sin dudas puede representar un recorte del electorado K en las PASO que tiene un techo conocido en la ciudad del 42% con la elección de Horacio Tellechea y un piso de 25% en la última elección en la que fueron representados por Facundo López
Así las cosas, con internas naturales y otros movimientos sutilmente acicateados por el oficialismo de Nueva Necochea, es que la lista de Arturo Rojas podría explotar a su favor la fragmentación tanto en la izquierda como en la derecha del abanico político, instaurándose como una opción localista con alto conocimiento y nutridos recursos tomados del Estado Municipal para sostener su campaña.
Diario 4v
Publicado en lanuevacomuna.com