El mal recuerdo del Rodrigazo
Ocurrió en 1975, durante la presidencia de María Estela Martínez de Perón. El ministro de Economía en ese momento, Celestino Rodrigo anuncia un paquete de medidas desesperadas, entre ellas el congelamiento de precios con consecuencias desastrosas y una crisis social dramática.
Celestino Rodrigo era ingeniero, pero con muy buena relación con José López Rega. Asumió como ministro de Economía de la entonces presidenta María Estela Martínez de Perón (Isabel) el 2 de junio de 1975.
Al otro día de asumir anunció un aumento en las tarifas de pasajes aéreos y varios turistas quedaron varados porque se los obligaba a pagar los aumentos de los pasajes de regreso. Rodrigo decía: «El que viaja no produce, pero sí gasta».
El 4 de junio anuncia el ajuste principal que consistía en:
- Devaluación del peso en relación al dólar en el mercado oficial, pasando de una tasa de 10 pesos por dólar a otra de 26 pesos por dólar.
- Alza promedio de un 100 % de todos los servicios públicos y transporte.
- Alza de hasta un 180 % de los combustibles.
- Como contraparte, aumenta un 80 % los salarios.
Estas medidas dispararon la inflación, licuando gran parte de las deudas de las empresas (que estaban en pesos), y disminuyendo enormemente el poder adquisitivo de los trabajadores. Ante semejante situación, la CGT intentó negociar con el gobierno un mayor aumento de salarios, que gracias al desborde y fuerte movilización de los trabajadores, generaron el primer paro contra un gobierno peronista y finalmente se acordó un aumento en promedio del 180 % en los salarios, pero que en gran parte fue licuado por la inflación.
El intento causó una profunda crisis que pasó a la historia como el «Rodrigazo».
Las Causas que originaron estas medidas
Dos días después de entrar en el Ministerio de Economía, Rodrigo y el viceministro de Economía Ricardo Zinn aprobaron estos ajustes con los querían eliminar la distorsión de los precios con una fuerte devaluación del 160 por ciento para el cambio comercial y el 100 por cien para el cambio financiero.
A esta medida se sumaron otras como la subida de un 100 por cien de los servicios públicos y de transporte y un 180 por ciento de los combustibles. Sin embargo, los salarios sólo subieron un 45 por ciento.Los argumentos oficiales se basaron en reducir el déficit público, aumentar la productividad de las empresas a través de la devaluación de la moneda e incrementar la tasa de ganancia de las empresas, que en los últimos años iba disminuyendo.
¿Se viene otro RODRIGAZO?
Los ajustes dispararon la inflación (llegó a 777 % anual) y provocó una disminución enorme del poder de compra de los trabajadores. Además, produjo desabastecimiento de gran cantidad de productos básicos, al igual que de combustibles y transporte. pic.twitter.com/YrZFoo5lSi— LANUEVACOMUNA.COM (@LANUEVACOMUNA) 10 de abril de 2019
Los argumentos oficiales, fueron «sincerar» la economía argentina, reducir el enorme déficit público existente y aumentar la productividad de las empresas vía devaluación del peso. Otros opinan que también se buscaba hacer perder poder a los sindicatos, licuar deudas de empresas y bancos, y sobre todas las cosas, aumentar la tasa de ganancia de las empresas, que en los últimos años venia disminuyendo.
El Rodrigazo disparó la disputa por el reparto del ingreso, en medio de vacío de poder y espiral de violencia política. Ricardo Zinn, el verdadero cerebro detrás de este ajuste, sabía perfectamente las consecuencias de las medidas tomadas. Era un hombre profundamente conservador, que luego pasaría a ser funcionario de la dictadura militar. Para Zinn, había una «guerra» por la distribución del ingreso, y eran las empresas las que debían ganar.
Consecuencias del Rodrigazo
A pesar de que el ingreso real en 1974 estaba en niveles históricos, la situación en esos años distaba mucho de ser muy buena. Había una fuerte inflación reprimida, una economía «recalentada» y un modelo totalmente insostenible, especialmente si tenemos en cuenta la coyuntura nacional e internacional.
Muchos economistas y el mismo Celestino Rodrigo, han justificado el ajuste, argumentando que había que «sincerar» la economía Argentina y que de una forma u otra, era inevitable este proceso. Si bien es cierto que la economía en 1975 estaba al borde del colapso, por lo cual, se podía justificar ciertas medidas poco populares, no debe olvidarse la enorme puja distributiva que hubo en Argentina en ese periodo y que la enorme regresividad del ingreso, producida por el Rodrigazo, escapa a cualquier «sinceramiento de la economía«.
Este conjunto de medidas cambiaron totalmente la estructura del salario en la Argentina, para no volver nunca más ser lo que fue. Fue el mayor ajuste realizado en la Argentina hasta esa fecha. Rodrigo, después del golpe de Estado en 1976, fue procesado por un caso de corrupción y pasó casi 4 años en prisión.
Primera huelga contra un gobierno peronista
Ante esta situación, la Confederación General del Trabajo de la República Argentina (CGT) intentó negociar con el Gobierno un mayor aumento de salario, que terminó en una fuerte movilización por parte de los trabajadores y generó la primera huelga contra un Gobierno ‘peronista’ el 27 de junio de 1974.
Los obreros llegaron a la Plaza de Mayo coreando insultos a Celestino Rodrigo y al ministro de Bienestar Social, José López Rega, lo que puso en cuestión también a la presidenta.
Finalmente, el Gobierno cedió y homologaron los convenios que superaban la inflación, se acordó un aumento de los salarios en un promedio de 180 por ciento y el ministro de Economía Rodrigo renunció al cargo.
“VA A REVENTAR TODO COMO EN EL RODRIGAZO”: DESCONFIANZA EMPRESARIAL POR MEDIDA DEL GOBIERNO https://t.co/tPx9GMzhQk pic.twitter.com/yn72gW3Udh
— LANUEVACOMUNA.COM (@LANUEVACOMUNA) 10 de abril de 2019
Los de frente de todos como tienen casa de concreto nosotros los vamos a mandar a la mierda lacras corruptas asesinos del futuro de nuestros hijos
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Anónimo
190.174.8.135
Celestino Rodrigo fue el único Ministro de Economía EXPULSADO de su colegio profesional. Punto para los ingenieros.