En un evento trascendental para la comunidad académica y científica de la región, el Consorcio de Gestión de Puerto Quequén participó el pasado viernes 6 de diciembre en la presentación oficial de la Tecnicatura Universitaria en Equipamiento Agroindustrial y en la inauguración de las instalaciones del Laboratorio de Ecología Evolutiva Humana, ubicado en la sede de Quequén de la Universidad Nacional del Centro (UNICEN).


Entre las novedades más destacadas, se encuentra la instalación de un Espectrómetro de Masas por Razones Isotópicas (IRMS), un equipo de alta precisión científica que representa una de las mayores inversiones realizadas en la UNICEN en las últimas tres décadas. Este equipamiento, único en su tipo en el país, fue adquirido gracias al aporte del puerto, que financió las adecuaciones eléctricas y estructurales necesarias para garantizar su correcto funcionamiento.
“La educación como motor de igualdad”
La presidenta del Consorcio de Gestión de Puerto Quequén, Lic. Jimena López, remarcó durante su discurso la importancia de sostener espacios educativos inclusivos y accesibles. «Vamos a seguir insistiendo que no sirve solamente la meritocracia. Es necesario que estos espacios se sostengan porque el hijo de cualquier obrero u obrera tiene que poder acceder a una educación de calidad, gratuita y laica», afirmó. Asimismo, expresó su esperanza de evitar la fuga de cerebros, aludiendo al impacto negativo que implica la pérdida de profesionales formados para el desarrollo nacional.

Ciencia de vanguardia al servicio de la región
El Laboratorio de Ecología Evolutiva Humana no solo contará con el IRMS, sino también con un equipo interdisciplinario liderado por el Dr. Luciano Valenzuela, responsable técnico del espectrómetro. Junto a él trabajan la Dra. Rosa María Alonso Salces y los Licenciados Felipe Otero y Luciano Loupias, además de becarios e investigadores comprometidos con los proyectos de investigación en curso.

Este avance posiciona a la región como un polo científico-tecnológico en crecimiento y fortalece los lazos entre las instituciones públicas y la comunidad, marcando un ejemplo de cómo el compromiso conjunto entre el sector portuario, la educación y la ciencia puede convertirse en un motor para el desarrollo sostenible y equitativo.
La Nueva Comuna