Una empresa inescrupulosa arrojó a la vía pública una considerable cantidad de desechos de semillas con productos altamente tóxicos. Intervino la Policía Ecológica y el Municipio.
Los vecinos de un sector de Quequén se despertaron este viernes 6 de septiembre, con una sorpresa nada agradable: en las calles, en los patios de las casas e incluso hacia el interior de las viviendas, aparecieron desechos de semillas (granza) contaminadas con agrotóxicos.
El episodio parece haber tenido centro en los alrededores de la intersección de la avenida 554 y calle 531 y tuvo inmediata repercusión en la comunidad. Sigue fresco en la memoria de todos, el episodio ocurrido hace unos años atrás donde perdiera la vida la joven Melisa Núñez por un derrame tóxico en las cañerías de desagúes.
Esta vez, se trata de una gran cantidad de residuos producto del procesamiento de semillas, con un producto fungicida (matahongos). Presuntamente habría sido liberado por una planta secadora de granos ubicada en la zona de las calles 554 y 531, señalan los vecinos.
El producto habría sido diseminado al ambiente en horas de la noche, por lo que se lo pudo observar en las orillas de las calles, dentro de los patios y hasta en el interior de las viviendas del lugar.
En el caso, intervino la Policía Ecológica local y la Dirección de Medio Ambiente del municipio, tomando las decisiones correspondientes al caso.
Se sabe también, que los vecinos tomaron muestras para ser enviadas a laboratorios privados especializados en agrotóxicos para así asesorarse de forma correcta y tomar las medidas que correspondan.