Este 7 de agosto, más que nunca, se alza un grito de necesidad y esperanza en Argentina. En el marco del Día de San Cayetano, Patrono del Trabajo, los Movimientos Populares han organizado una jornada de lucha y solidaridad, recordando la histórica marcha de 2016 que culminó con la aprobación de la Ley de Emergencia Social y la creación del Salario Social Complementario.
Desde aquel significativo avance, la lucha por Tierra, Techo y Trabajo ha sido constante. Sin embargo, la situación actual exige una mayor urgencia y unidad. Bajo el gobierno libertario, las políticas han sido percibidas como crueles y persecutorias hacia los sectores más humildes de la sociedad. Un brutal ajuste y la interrupción de la entrega de alimentos secos a los comedores populares, a pesar de las órdenes judiciales, han agudizado la crisis.
Las cifras son alarmantes: el 55% de la población vive en la pobreza, y la indigencia alcanza al 20,3%, según el último informe del Observatorio de la Deuda Social de la UCA. Lo más preocupante es que siete de cada diez niños y niñas en Argentina son pobres, y tres de cada diez viven en la indigencia. Ante este panorama, los Movimientos Populares y la UTEP-EVITA declaran: «El hambre es un crimen».
Para mitigar esta situación, continúan sosteniendo módulos alimentarios en barrios como Álamos, Malvones, Estrellita y Ovillitos de Lana. Este 7 de agosto, invitan a todos los que necesiten apoyo a una olla popular, en colaboración con las centrales sindicales y otros movimientos populares. El evento se llevará a cabo en el Espacio de Primera Infancia Micaela, ubicado en Avda 98 esquina 79, a partir de las 12 hs.
Este llamado es un recordatorio de la lucha continua por una vida digna y un esfuerzo conjunto para enfrentar la crisis actual. En un día dedicado al trabajo y la solidaridad, la comunidad se une para exigir Paz, Pan, Tierra, Techo y Trabajo para todos.
La Nueva Comuna
