"Los vecinos de Necochea no deben olvidar este manual de la mitomanía proselitista"
Lo que comenzó como una promesa de esplendor renacentista y de grandeza futura para
Necochea, está mostrando hoy síntomas de no ser más que un conjunto de mentiras
compuestas a la marchanta y al ritmo de cambalache.
Ya a poco de asumir el actual Intendente se empezaron a notar las falencias, disimuladas
por aquello de «recién llegamos, necesitamos tiempo». Pero precisamente el tiempo está
demostrando que lo que empezó como un leve resfrío hoy ya es una contundente gripe,
con un estado interno febril en crecimiento. El cuadro médico del gobierno municipal
se presenta con principios de acefalia, seguido con brotes de repentinos cambios de
funcionarios y la aparición cuasi milagrosa de nuevos funcionarios presentados como la
vacuna que salvará al enfermo.
Los resultados de la precariedad de los proyectos, la incapacidad de las acciones y la
intolerancia para escuchar a quienes procuran arrimar soluciones alternativas, ha dejado
una ciudad con las calles asfaltadas transformadas en trincheras, las de tierra en restos
de bombardeo, los caños rotos perdiendo por meses el agua que aconsejan cuidar y
los vecinos librados a la buena de Dios para llegar a sus casas. Ni siquiera los semáforos
andan.
El pueblo votó bajo el chantaje de que el único sector que tenía «sintonía» con la Provincia
y la Nación era el Frente para la Victoria. Para eso estaban las visitas del vicepresidente
Boudu, del vicegobernador Mariotto, las teleconferencias con la Presidenta y la música de
La Mancha de Rolando. Era la puerta para un porvenir dorado que podíamos perder si no
se votaban a los «amigos de los amigos». Venían años maravillosos, con crecimiento para
la ciudad, puestos de trabajo, mayor seguridad, nueva terminal de ómnibus, apertura del
frente costero, castración masiva de canes callejeros, la gloria deportiva transmitida por
Hugo Morales y una inauguración de temporada con estrellas cinematográficas invitadas
que dejaría a Cannes a la altura de un cumpleaños de quince.
Los vecinos de Necochea no deben olvidar este manual de la mitomanía proselitista a la
que se encaramó el actual gobierno municipal. De esos gérmenes vinieron estas gripes
que hoy afiebran a nuestros módicos representantes. A los que parece que ya no salva
(sino más bien complica) el instrumental médico que bien pagamos y que debería estar al
servicio de la población.
CENEPOS – Centro de Estudios Políticos y Sociales.
Carlos Falcone- Mara Laxalt- Alvaro Asorey- Mónica Milán-