Javier Milei abre un frente crítico al Mercosur, lo que podría afectar gravemente a miles de empresas que dependen del comercio con Brasil, el principal socio comercial de Argentina.
El Gobierno ha manifestado su intención de avanzar con acuerdos bilaterales fuera del bloque regional, e incluso ha insinuado una posible salida del Mercosur. Sin embargo, un movimiento de esta naturaleza implicaría no solo costos significativos para el Estado, sino también para empresas de todos los tamaños que mantienen relaciones comerciales con los países miembros. En los primeros diez meses del año, las exportaciones a Brasil representaron casi el 17% del total de las ventas externas, consolidando al país vecino como el principal destino de exportación, seguido de China, Chile y Estados Unidos.
Riesgos de una ruptura
Una salida del Mercosur significaría la anulación de acuerdos que han sido construidos durante más de tres décadas, abarcando aspectos comerciales, productivos, culturales y educativos.
“No es sencillo desarmar procesos de integración de más de 30 años. Abandonar el bloque pondría en peligro acuerdos arancelarios clave con Brasil, nuestro principal socio comercial”, explicó Eduardo Sigal, ex subsecretario de Integración Regional de la Cancillería, en diálogo con El Destape.
En el período de enero a octubre, las exportaciones al Mercosur alcanzaron 14.059 millones de dólares, representando el 21,3% del comercio exterior argentino. Brasil absorbió el 79,1% de estas exportaciones, equivalente a 11.124 millones de dólares.
“Argentina y Brasil tienen un esquema de preferencias arancelarias que podría desaparecer si dejamos el Mercosur. Esto afectaría, por ejemplo, a las automotrices que exportan componentes como cajas de cambio fabricadas en el país y ensambladas en Brasil. Sin estas preferencias, muchas empresas podrían entrar en crisis”, advirtió Sigal.
Impacto en la industria
Daniel Rosato, presidente de Industriales Pymes Argentina, expresó su preocupación por la dirección que parece tomar el Gobierno. Según Rosato, “la propuesta de reducir aranceles para mejorar la competitividad es contradictoria, ya que los costos industriales siguen aumentando mes a mes”.
Rosato argumenta que, en lugar de alejarse del Mercosur, el país debería fortalecer acuerdos de intercambio que prioricen el valor agregado, un enfoque que considera ajeno al modelo impulsado por la administración actual.
El impacto de una salida del Mercosur sería devastador tanto para grandes empresas como para pymes. Según datos del INDEC, en octubre los principales productos exportados al Mercosur fueron vehículos, aceites crudos de petróleo y trigo, representando el 44,7% del total exportado al bloque.
“La crisis industrial pyme se profundiza con las políticas económicas actuales”, afirmó Rosato, quien advirtió que, de continuar en esta línea, unas 25.000 pymes podrían cerrar en 2025, equivalente al 5% de las empresas del sector.
Un camino incierto
La salida del Mercosur no solo podría generar una crisis comercial y productiva, sino también alejar a Argentina de un modelo de integración regional que ha sido clave para su desarrollo económico durante décadas. Los riesgos, tanto para el sector privado como para la economía nacional, son innegables y plantean dudas sobre la viabilidad del enfoque propuesto por el Gobierno.
Con información de El Destape
Publicado en lanuevacomuna.com
