El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, manifestó hoy que «es un auténtico escándalo» la posibilidad de que la Cámara Federal de Casación Penal ratifique este miércoles la condena contra Cristina Kirchner a seis años de prisión por el supuesto direccionamiento de obras públicas en Santa Cruz en el marco de la causa Vialidad.
«Es un escándalo judicial el fallo que se espera el miércoles, según anticipan los medios», expresó el mandatario en una rueda de prensa en la Casa de Gobierno, en La Plata, junto al ministro de Gobierno, Carlos Bianco; el ministro de Justicia, Juan Martín Mena; el ministro de Desarrollo, Andrés Larroque; y la vicegobernadora Verónica Magario.
Se estima que la Cámara ratificará la sentencia que el Tribunal Oral Federal N° 2 dictó el 6 de diciembre de 2022, condenando a la exmandataria por fraude contra la administración pública. Desde el entorno de Fernández anticiparon que, si eso ocurre, recurrirán a la Corte Suprema, evitando que la condena quede firme por el momento.
Kicillof destacó que, incluso si Casación confirma el fallo, la titular del Partido Justicialista no iría a prisión de inmediato, ya que la condena solo se haría efectiva una vez agotadas todas las instancias judiciales, es decir, cuando la Corte Suprema rechace cualquier apelación final, lo que podría llevar años.
El gobernador criticó el proceso, diciendo que «inaugura un género nuevo, derecho ficción, con fallos sin pruebas, sin delito, en los que a la acusada, Cristina, se le imputa algo que no podría haber ejecutado en virtud de su rol administrativo».
Sostuvo que «se generó una operación para crear una imagen negativa que luego fue aceptada casi como un sentido común», y añadió que «en los expedientes no hay una sola prueba que relacione a ella con alguna irregularidad».
«Es fantasía. Lo que se pretende anunciar el miércoles no ocurrió, sino que es parte de una estrategia de disciplinamiento. Un juicio armado y una condena ficticia para desprestigiar. Además, la condena incluye la prohibición de ocupar cargos públicos, lo cual es persecución y proscripción,» expresó Kicillof, calificando la situación como «gravísima en términos históricos, políticos y legales, también mirando hacia el futuro».
El gobernador remarcó que se comprobó en la Justicia que «las obras se realizaron y sin sobreprecios», señalando que «este proceso carece de fundamentos, sin elementos suficientes ni para una condena ni para iniciar un juicio». En sus palabras, «es un camino de infamia, no hay pruebas de los delitos juzgados».
Además, subrayó: «La sentencia ya está escrita, nos lo anticipan los diarios. Hay jueces que mantenían relaciones de cercanía con Mauricio Macri y ahora aparecen como neutrales para dictar una sentencia». Y añadió: «Es otro capítulo en este proceso de persecución política, judicial y mediática, conocido como ‘lawfare’.»
«Rechazamos y condenamos totalmente lo que ocurrirá el miércoles. Queremos denunciarlo, repudiarlo y expresar nuestra solidaridad absoluta con Cristina, quien es la víctima de esta situación. Desde el gobierno de la provincia seguiremos trabajando para que el Poder Judicial no se preste a estas maniobras», concluyó Kicillof.
Con información de Ámbito
Publicado en lanuevacomuna.com
