Este jueves al mediodía, un inquietante hallazgo sacudió a un grupo de vecinos. En una zona alejada de la ciudad, concretamente en la intersección de la avenida 98 y la calle 127, los residentes encontraron un esqueleto humano empalado en una barra de hierro.
El descubrimiento, ocurrido a pocas cuadras del Cementerio local, provocó una rápida respuesta de las fuerzas de seguridad.
Los restos óseos, atravesados por una estructura metálica, fueron localizados a un lado de la avenida 98. La proximidad al cementerio ha dado lugar a varias conjeturas, incluyendo la posibilidad de que se trate de un acto relacionado con prácticas oscuras o ritualísticas.
Ante este escenario, se convocó de inmediato a personal de la Policía Científica para realizar las pericias correspondientes. Los especialistas en criminalística buscarán determinar tanto la antigüedad de los restos como su origen, para esclarecer si efectivamente corresponden a un ser humano y, de ser así, a quién podrían haber pertenecido.
Las autoridades mantienen todas las hipótesis abiertas, aunque subrayaron que se requiere tiempo para llevar a cabo los análisis necesarios que permitan aclarar este extraño y perturbador suceso. La zona permanece bajo custodia policial.
Con información de Diario 4V
Publicado en lanuevacomuna.com
