El egoísmo que depositaron en las urnas les explotó en la cara
Por Lucrecia Arremolina
Casi un kilómetro de cola (ocho cuadras) de argentinos haciendo cola en el consulado de Italia, huyendo de la Revolución de la Alegría.
Muchísimos de ellos, macristas. De esos voy a hablar. Esos que pasaron de sentirse Steve Jobs quejosos de no comprar infinitos dólares con Cristina, a irse a limpiar mierda de gringo a Europa por dos mangos, gracias al apoyo incondicional que le dieron a su adorado Macri.
Sí. Ahí los tenés, comprobando que el egoísmo que depositaron en las urnas les explotó en la cara, desfigurándoles la vida.
Sí, señores: porque hoy se van del país miles de macristas que votaron a Cambiemos para «no tener que irse un día del país, como pasa en Venezuela», mientras cuando temían ser Venezuela con Cristina, gozaban de los salarios más altos en dólares de toda Latinoamérica.
Latinoamérica deberá preparar un corredor humanitario para los argentinos#MigracionForzada #emigrantes #CrisisHumanitaria #migración #Argentinos #EmigrantesArgentinos pic.twitter.com/hVOefbMbZu— INFO EN PROCESO (@INFOENPROCESO) 5 de octubre de 2018
Sí señores. Se van del país esos macristas que están en contra de «los inmigrantes de mierda que te invaden el país para quitarte el trabajo», pensando en cómo harán para quitarle el trabajo a un gringo, de acuerdo con la patética lógica egoísta e individualista con la que ellos interpretan el mundo.
Sí. Incluso algunos de ellos se irán a intentar sobrevivir como puedan en las calles italianas. Los mismos que aumentan su fidelidad a este gobierno mientras más se apalea y más encarcela los senegaleses negros que sobreviven como vendedores ambulantes.
Sí, mis queridos. Macristas emigrando del país en un riesgoso vuelo low cost, huyendo espantados del mismo neoliberalismo que te defenderán esquizofrénicamente si se sientan a tu lado en el avión. Macristas que sufren de esa misma disociación mental que les hace sentir un inconfesable alivio cuando en el Mediterráneo se hunde un barco repleto de negros intentando ingresar a la Unión Europea. Porque aunque ellos también arriben como desesperados inmigrantes, no pueden dejar de identificarse con los xenófobos valores que profesa el gringo que lo mirará con miedo y desprecio.
Estimados emigrantes macristas: les deseo todo el éxito del mundo en el consulado de Italia. Váyanse del país y no vuelvan nunca más. Váyanse y limpien todos los inodoros repletos de mierda que tengan que limpiar hasta que un día los elijan para hacer una performance TED en donde nos expliquen cómo compraron sus cinco millones de dólares limpiando mierda en Europa, esos que tanto lamentaron no poder comprarse durante el gobierno de Cristina.
📢 ESTO YA LO VIVIMOS
Colas de una cuadra en la embajada italiana. 😢 pic.twitter.com/sOc5Kioivg— Oeste con vos (@oesteconvos) 10 de mayo de 2018
Los emigrantes argentinos van a pic.twitter.com/CkP8bKnXWK— Lo leí en Pravda 🌀 (@sinemetu) 22 de enero de 2017
PUBLICADO EN LANUEVACOMUNA.COM