Este sábado, el Papa Francisco calificó como un acto de «crueldad» los bombardeos israelíes que resultaron en la muerte de niños palestinos, y criticó la negativa de las autoridades israelíes a permitir que el Patriarca de Jerusalén de los Latinos, el cardenal Pierbattista Pizzaballa, ingresara a la Franja de Gaza. La respuesta de Israel no se hizo esperar, tildando las declaraciones del pontífice de «decepcionantes» y «desconectadas de la realidad del conflicto contra el terrorismo yihadista».
«Ayer no dejaron entrar al Patriarca en Gaza, como habían prometido», lamentó el Papa durante una audiencia de Navidad con la Curia romana, refiriéndose a Pizzaballa. «Y ayer bombardearon a niños. Esto es crueldad, esto no es guerra, lo digo porque toca el corazón», agregó Francisco. La declaración ocurrió un día después de haber recibido al presidente palestino, Mahmoud Abbas, en el Vaticano.
Por su parte, el gobierno israelí reaccionó con firmeza. «Las palabras del Papa son particularmente decepcionantes, ya que ignoran el contexto real y concreto de la lucha de Israel contra el terrorismo yihadista», expresó la cancillería israelí en un comunicado oficial. Además, añadieron: «Basta ya de hipocresía y de señalar a Israel y a su pueblo».
El comunicado israelí también argumentó que «la verdadera crueldad es que los terroristas mantengan a más de 100 rehenes durante 442 días, incluidos niños y un bebé, sometiéndolos a abusos», en referencia al ataque perpetrado por milicianos de Hamas en el sur de Israel el 7 de octubre de 2023, que desató el actual conflicto en Gaza.
Asimismo, Israel defendió sus operaciones, asegurando que están dirigidas contra terroristas que «utilizan a niños como escudos humanos». Subrayaron que, mientras sus fuerzas realizan «esfuerzos extraordinarios para minimizar el daño a los civiles», Hamás busca «intensificar el sufrimiento de los palestinos».
El viernes, la Defensa Civil de Gaza informó que diez miembros de una misma familia, incluidos siete menores, perdieron la vida en un ataque aéreo israelí en Jabaliya, al norte de la Franja. Sin embargo, el ejército israelí, al ser consultado por la agencia AFP, afirmó que el reporte no coincide con su información. Según su versión, el ataque iba dirigido contra «varios terroristas que operaban en una instalación militar de Hamas y representaban una amenaza».
Con información de Página 12
Publicado en lanuevacomuna.com