«Mi familia va a seguir luchando para que se haga justicia»
Mercedes Fernández, madre de la joven Melisa Núñez, fallecida a raíz del derrame tóxico ocurrido en Quequén el 13 de Abril de 2015, se mostró consternada por el cambio de carátula operado en el caso y aseguró que seguirá «apelando junto al abogado para que sea cambiada a dolo eventual».
«Hace casi dos meses que no veníamos y hoy nos encontramos con esta carátula nueva, cuando está más que visto que es un delito doloso», manifestó.
«Le sacaron todos los órganos, los ojos, el cerebro, el hígado, el riñón, el corazón, le sacaron todo y tan poco valió», agregó Mercedes, argumentando que el juez no tuvo en cuenta los resultados de las pericias para tomar la decisión.
La madre de Melisa detalló que deberán esperar otros 15 días para conocer la respuesta a la apelación: «vamos a esperar 15 días a ver qué nos responden. Esperamos tener buenas respuestas», declaró.
«Los Cañada siguen sueltos, trabajando como si nada»
Mercedes remarcó, además, que durante todo este tiempo no ha tenido ningún tipo de contacto con los empresarios Cañada, dueños de la empresa Shipinsuarence S.A. e implicados directos en el derrame tóxico que acabó con la vida de su hija.
«Conmigo no se acercó nadie y al abogado tampoco», declaró, y destacó que «los vecinos también están esperando que alguien se acerque porque tienen sus casas destruidas por las explosiones».
La madre de Melisa se declaró entre sorprendida y desolada por el hecho de que los responsables del crimen sigan sueltos, y subrayó que aún «hay mucha gente preocupada por esto, porque siguen viviendo entre veneno».
«Los Cañada siguen sueltos, y cada vez que vengo me encuentro con una realidad de no creer porque siguen trabajando en la zona portuaria como si nada, bajando sus venenos y trabajando con eso», manifestó.
