«El monto quedó desactualizado luego de la devaluación y la inflación vividas en el último semestre”
Consejeros escolares denunciaron que, a pesar de que la demanda en los comedores escolares creció un cien por ciento en los colegios del Conurbano, desde el gobierno de la Provincia de Buenos Aires redujeron los cupos un 24 por ciento.
Alarmados por estas cifras y su impacto en la nutrición de los alumnos, desde la Unión de Consejeros Escolares Justicialistas (UCEJ) mantuvieron un encuentro con diputados y senadores para manifestar su preocupación ante la falta de respuestas.
Desde UCEJ también expresaron la preocupación por las condiciones edilicias de las escuelas y la falta de recursos para realizar trabajos de infraestructura en los establecimientos educativos de la Provincia.
“Los colegios están recibiendo un fondo especial de 1.800 pesos para solventar gastos como arreglar o cambiar estufas. Es ridículo. Mientras tanto, las partidas giradas por Nación dejaron de llegar a los colegios de nuestra Provincia», reclamaron en forma conjunta los consejeros escolares.
Del encuentro participaron diputados y senadores provinciales y los consejeros escolares Roberto Grobela (Lanús), Ángel Debrassi (Tres de Febrero), Hector Peñalba (Berazategui), Noemi Peccenino (Ituzaingo) y Gastón Mansilla (Hurlingham), entre otros.
En sintonía con los consejeros escolares, desde los sindicatos Soeme, ATE y Suteba vienen advirtiendo esta alarmante situación. Es que los dirigentes gremiales saben que los chicos con hambre tienen problemas para aprender, y sin educación no hay futuro viable.
Malnutrición por falta de decisión política
Un estudio elaborado en base a testimonios de docentes y padres de numerosas instituciones escolares de la Provincia detalla que a los cocineros en esas entidades se les torna “imposible cumplir con el menú nutritivo, debido a que deben ceñirse a un presupuesto fijo e inamovible”.
El gobierno bonaerense de María Eugenia Vidal destina 12,60 pesos por cada chico que almuerza en alguna escuela de la Provincia, es decir unos 63 pesos semanales. Esto, en parte, explicaría lo indicado en un informe del Instituto de Investigación Social, Económica y Política Ciudadana (Isepci) que se dio a conocer semanas atrás: que la malnutrición afecta al 44% de los niños y jóvenes del Conurbano en edad escolar, muchos de los cuales tienen su principal alimentación en los comedores.
Cubrir estos costos requeriría incrementar en apenas 1,24% anual el presupuesto Provincial, fijado en 354 mil millones de pesos. Es decir, se necesita menos dinero que voluntad para comenzar a llevar alivio a los millones de estudiantes a los que hoy el Gobierno no les garantiza eficazmente ni la comida ni el conocimiento.