Días después de la advertencia de Cristina Fernández de Kirchner por el supuesto “festival de importaciones”, el Banco Central informó una serie de medidas de corte cambiario orientadas a un mayor control en el sistema de pagos del comercio exterior. En otras palabras: más regulación a la hora de acceder a dólares para las importaciones. El faltante de la divisa estadounidense en las arcas del Estado preocupa al Gobierno. ¿Cuáles fueron las medidas?
• Extensión. Las definiciones del BCRA, publicadas en la Comunicación A 7532, extienden el sistema de financiación de importaciones a las realizadas bajo “Licencia No Automática” y a la importación de servicios y tendrán vigencia por un trimestre –es decir, hasta el último día de septiembre– para dar tiempo a la normalización del comercio exterior. Las empresas deberán buscar los dólares en créditos en el exterior o de sus propias casas matrices.
• PyMEs. Sin embargo, el documento aclara que “las pequeñas y medianas empresas quedan exceptuadas de las exigencias vigentes de financiar sus importaciones por un incremento de 15% respecto al año anterior, con un límite de hasta un millón” de pesos.
• SIMI A y B. En el nuevo esquema de pagos, las SIMI A mantendrán el acceso al mercado de cambios por el equivalente al promedio mensual de importaciones de 2021 más 5% o de 2020 más 70%. En cambio, las SIMI B correspondientes a las Licencias No Automáticas podrán acceder al mercado a partir de 180 días del despacho a plaza.
• Desarrollo Productivo. Se coordinará en conjunto con el Ministerio de Desarrollo Productivo, dirigido por el flamante ministro Daniel Scioli, para ampliar las posiciones arancelarias de bienes equivalentes a los producidos en el país que tendrán acceso al mercado a partir de 180 días y la de bienes suntuarios que podrán acceder a partir de los 360 días. En declaraciones periodsíticas, el titular del BCRA, Miguel Pesce, comentó que con esto esperan “reducir el impacto de las importaciones en los próximos meses y esperamos acumular reservas” y anticipó que, “cuando baje el consumo de importaciones de energía”, volverán atrás con la medida.
• Servicios. El tratamiento de las importaciones de servicios será igual que el de bienes. Así, se permitirá el acceso al mercado por el mismo monto que en 2021 y en caso de superar el importe el saldo a 180 días.
• Bienes de capital. En cuanto a este tipo de importaciones, podrá pagarse un 80% en puerto de origen y un 20% con la nacionalización.
• Aceleración. Además, se facilitará la prefinanciación de exportaciones con el objetivo de acelerar el ingreso de divisas, especialmente del complejo cerealero, pasando la obligación de liquidar las divisas que se ingresen de 5 a 15 días, y la financiación a largo plazo para precancelar deudas locales en moneda extranjera.
El Canciller
Publicado en lanuevacomuna.com