El diputado Fernando Carbajal lanzó duras críticas contra De Loredo en Twitter, calificándolo de «libertario» luego de que el cordobés rechazara la resolución del Tribunal de Ética de la UCR que sancionó a Mariano Campero, Luis Picat y Martín Arjol por respaldar los vetos presidenciales de Javier Milei contra las jubilaciones y el presupuesto universitario.
«Vos entregaste a la UCR a cambio de cargos en el Poder Ejecutivo y ahora te hiciste libertario», escribió el legislador de Formosa, conocido por su tono vehemente dentro y fuera del Congreso.
Por su parte, De Loredo había calificado como «ilegítima, arbitraria y parcial» la decisión del tribunal partidario, acusándolo de priorizar «una interna antes que su verdadero rol». Según expresó el líder de la bancada radical, «con un bloque fragmentado en Diputados, y con legisladores que en varias ocasiones tomaron posturas distintas a las de sus espacios, se elige castigar sólo a algunos». Además, cuestionó: «Un partido pequeño, cerrado, burocrático, incoherente y con doble moral no sirve para nadie».
Carbajal, en respuesta, afirmó que la división interna fue consecuencia de las decisiones de De Loredo. «Como lo demuestran Kueider, De Petri (sic) y Bullrich, nadie se convierte en oficialista sin recibir algo a cambio: dólares o cargos. ¡Vamos a recuperar la UCR!», respondió en redes sociales.
La acusación apunta a un persistente rumor en los pasillos del Congreso: que el gobierno habría ofrecido pagos o puestos a ciertos legisladores a cambio de su respaldo. «La ‘Banelco’ de la Alianza queda chica», comentaba días atrás un opositor.
Una fuente legislativa también vinculó las críticas a De Loredo con el nombramiento de Alejandro Cacace, exsecretario parlamentario y hombre de confianza del cordobés, como integrante del gabinete de Milei.
Desde que Milei asumió la presidencia, las tensiones en el radicalismo dentro del Congreso no han cesado, y el bloque en la Cámara de Diputados terminó dividido. Legisladores como Campero, Picat, Arjol, Pablo Cervi y José Tournier provocaron la ruptura al no dar quórum para rechazar el veto al aumento del presupuesto universitario. Ante esta situación, el sector de Manes, junto a los aliados de Martín Lousteau y Emiliano Yacobitti, conformó un nuevo espacio llamado Democracia para Siempre.
El quiebre se profundizó con el alejamiento del santafesino Mario Barletta. De los 34 legisladores que componían la bancada radical el año pasado, De Loredo sólo conserva el apoyo de 20. Entretanto, los de Manes, encabezados ahora por Pablo Juliano, aprovechan cada controversia para reforzar su postura dentro del partido.
Por su parte, los legisladores sancionados por el tribunal partidario también se muestran desafiantes. «Nos van a tener que sacar con un grupo de tareas», advirtió uno de ellos, asegurando: «No vamos a retroceder ni un centímetro en la pelea por el partido ni en la lucha por el rumbo del cambio en la Argentina».
Con información de La Política Online
Publicado en lanuevacomuna.com