«No sólo se dilapida la democracia sindical sino también el aumento salarial»
El Secretario Gremial del Sindicato de Aceiteros de Necochea y Quequén, Sebastián Scott, denunció la connivencia entre el Secretario General, Alfredo Giuliano, el Ministerio de Trabajo de la Nación y las empresas Cargill y Oleaginosa Moreno – Glencore para «negociar salarios a la baja» que significarían «un perjuicio nefasto para las familias».
El conflicto interno en el Sindicato de Aceiteros de Necochea y Quequén lleva ya varios meses. Más de 140 afiliados al gremio exigen la renuncia de su Secretario General, Alfredo Giuliano, acusado de haberse apropiado de las instalaciones gremiales y de haber anulado las elecciones en connivencia con el Ministerio de Trabajo macrista.
«Quieren llevar adelante una paritaria a la baja»
En este marco, Scott aseguró además que la decisión de Giuliano y del Ministerio de Trabajo no sólo «dilapida la democracia sindical», sino que «al mismo tiempo se está dilapidando un aumento salarial necesario para todas las familias aceiteras».
En este sentido, el Secretario Gremial del sindicato aseveró que la intención de los mencionados actores es la de «llevar adelante una paritaria a la baja, que no tiene ningún tipo de consenso entre los trabajadores» y que significaría «un perjuicio nefasto para las familias» de los mismos.
«Giuliano ya ha hecho tratativas con Oleaginosa Moeno-Glencore y con Cargill para negociar salarios a la baja, menores a la inflación», denunció el representante gremial, argumentando que la intervención del sindicato tiene como objetivo fundamental aceptar las políticas del Estado nacional que buscan disminuir el poder adquisitivo de los trabajadores.
Por esta razón, Scott invitó «a las familias aceiteras a que acompañen a la mayoría, para que el reclamo sea unánime, se ajusten al derecho y escuchen la voluntad de los afiliados».