Gastón, la lealtad, los sueños y su ausencia
Sin dudas, Gastón Guarracino fue uno de los mejores dirigentes políticos que dieron estas tierras. Su prematura muerte truncó infinidad de posibilidades que se le abrían a cada paso en su corta pero brillante carrera política.
Sus capacidades se fueron desarrollando día a día, a medida que ocupó distintos cargos públicos. Fue tentado por todos los sectores, oficialistas y opositores, para ocupar sitiales de gobierno pero él siempre optó por el camino de la lealtad. Legisló y gestionó eficazmente y hasta construyó un proyecto político que se convirtió en esperanza.
Falleció joven, muy joven y trágicamente. Muchos le auguraban un futuro brillante. Su figura se agiganta con el paso del tiempo, máxime cuando se siente el vacío que dejó su partida.
El impacto de su fallecimiento es tal que el tiempo trascurre y su ausencia es un hecho político en sí mismo. A nadie se le escapa que si Gastón viviera, Necochea no estaría atravesando la profunda crisis institucional actual entre otras tantas cosas.
Estas imágenes datan de 2006, fueron tomadas en Buenos Aires por quien escribe estas líneas y son testimonio de los sueños de Gastón.
Alfredo Barros / LANUEVACOMUNA.COM

